Control excesivo
Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC)
Este paciente se sentirá tomado por pensamientos y actos obsesivos.
Técnicamente, las obsesiones se definen como ideas, pensamientos, impulsos o imágenes de carácter persistente que el individuo considera intrusas e inapropiadas y que provocan una ansiedad o malestar intensos. Aunque la persona es consciente de que estas obsesiones son el producto de su mente, a veces se siente incapaz de controlarlas y considera que no encajan en el tipo de pensamientos que él debería tener.
Técnicamente las compulsiones se definen como comportamientos (por ejemplo, lavados) o actos mentales (por ejemplo, rezar o repetir una palabra cien veces) de carácter recurrente, cuyo propósito es prevenir o aliviar la ansiedad o el malestar, pero no proporcionar placer o gratificación. En la mayoría de los casos los obsesivos se sienten impulsados a realizar la compulsión para reducir el malestar que lleva consigo un pensamiento determinado o bien para prevenir algún acontecimiento o situación negativos.
La mayoría de los adultos que presentan un trastorno obsesivo-compulsivo reconocen en algún momento que sus obsesiones o las compulsiones son excesivas o irracionales.
TOC Y TGFI (Trastornos funcionales gastrointestinales)
He observado en los pacientes que debido a su sufrimiento, se hallan permanentemente observando a sus intestinos que pasan a ser el foco de su atención. Es decir que se preguntan constantemente cómo estén sus intestinos, si arrojan síntomas etc, lo cual los lleva a un hipercontrol, por sentirse inseguros con sus esfínteres.
Son pacientes con características muy perfeccionistas y controladoras en relación a sus síntomas.
Resulta útil, en consecuencia, abordar y trabajar la temática del control que tan relacionada está en sus fuentes con la ansiedad.
El paciente, ante este cuadro, dependiente del sistema nervioso autónomo, siente que no depende de su control consciente y que pierde autoeficacia en sus funciones cotidianas.
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